martes, 24 de febrero de 2009

Ya en la tarde



Al atardecer refresca el día…
Bebe el calor de mi mano,
mi mano tiene la misma sangre de la primavera.
Toma mi mano, mi blanco brazo,
toma el ansia de mis menudos hombros…
Qué maravilloso sería sentir
en una noche, en una noche como ésta,
el peso de tu cabeza sobre mi pecho.

(Edith Södergran)

No hay comentarios:

Related Posts with Thumbnails